martes, 23 de febrero de 2010

Feliz Cumpleaños Para Mí

"Que tengas un Feliz Cumpleaños", lugar super común de las tarjetas Hallmark, se convirtió en una realidad, mucho más allá que las palabras. El 19 de febrero no fue un día feliz para mí... fue un día memorable. Lo memorable de este cuento empezó para mí desde el día anterior, al apagar las velitas del pastel de Sanborn's que me ofrecieron mis compañeros de trabajo. El típico pastel de Sanborn's relleno de mermelada de fresa y nueces, adornado con enormes flores de merengue. El típico pastel que mi mamá compraba para las fiestas de las cuatas, cuando éramos chiquitas. Yo creo que por eso me gusta tanto, así como me gusta la mayonesa McCormick, el Chocomilk Pancho Pantera y la miel Karo maple. Lo que comía cuando niña es lo que me sigue gustando. ¿Será por la nostalgia?

Más tarde, fui a plaza a pagar la tarjeta de crédito del PPH. Adivinaste, compras decembrinas que estoy pagando a 18 mil meses sin intereses, SUFRO cada mes. Ya estando ahí decidí no ir al club a hacer ejercicio, fui indulgente conmigo misma, con el pretexto de que al día siguiente era mi cumplete, palabra que plagio de mi primo León. En lugar de matarme en el gimnasio opté por marmotear un rato en el centro comercial, prometiéndome a mí misma no comprar dementemente con el pretexto de mi cumple.

Salí del PPH e iba caminando frente a Sanborn's, pensando en la marmota, cuando me topé de frente con Marco Vernon, quien noté se puso nervioso, más que feliz, de encontrarme, sin haberlo planeado, entre tanta gente. Como toda buena mujer, tengo ojos de scanner y parabólica integrada, por tanto alcancé a ver cómo escondía tras de sí una bolsa de papel roja y grande. Me dio risa y lo miré a los ojos. No supo qué decir y supongo que por eso sólo atinó a preguntar qué me ocasionaba tal hilaridad. Lo que escondes tras de ti, díjele sonriendo. Al verse atrapado con las manos en la masa, su alternativa más viable fue reconocer que los planes de sorprenderme habíanse ido de paseo. Como diría mi mamá: "Uno pone, Dios dispone, viene el Diablo y todo lo descompone"; o como diría Lennon "La vida es lo que sucede mientras estás ocupado haciendo planes"; o como díría yo: "Lo único que cuenta es el aquí y el ahora".

El caso es que de cualquier manera fue una sorpresa bastante agradable la forma en que recibí el regalo de cumpleaños de parte de MV. Nos fuimos a cenar al Italiannis esa ensalada campesina que tanto me gusta. Te la recomiendo ampliamente.

El mero día de mi cumple el plan era ir primero al club a hacer ejercicio -y yo que había sido tan indulgente conmigo misma una noche antes-, para luego tomar la carretera con rumbo a la tierra que me vio nacer. Afortunadamente llamó mi amiga Alejandra para cantarme las mañanitas y, al saber cómo era nuestro itinerario, apuntó para mi bien y el de toda mi santa indulgencia: "¡Están enfermos! Yo, que ustedes, ya estaría en Acapulco". Dicho esto en el altavoz del aparato telefónico, retacamos el coche con todo lo necesario para un fin de semana y emprendimos el viaje por los caminos del sur.

Los volcanes enamorados y el Ajusco, todo solitario, nos acompañaron buena parte del trayecto. Cielo azul y sol brillante, hasta apetito me dio y paramos en la Fonda 4 Vientos para comer cual pelones de hospicio. Pedimos y acabamos con varios tacos de cecina de Morelos, frijoles bayos refritos, chilaquiles en salsa verde con crema y queso fresco. Nos tomamos dos Yolis y de postre arroz con leche y flan de queso.

La verdad es que esa noche yo no tenía mucha hambre, pero era menester, justo y necesario, seguir con la celebración. El lugar seleccionado fue el Bistro Mosaico, cuyo menú francés en otras circunstancias me habría fascinado, pero esa noche, tras el atracón que me había prodigado en el 4 Vientos, todo me parecía excesivo y muy pesado. Y ahí nos tienes a Chimis, Chalo, mi tía Irma, quien además es mi madrina, a MV y a mí buscando platillos ligeros para no subir los kilos que ya hemos eliminado con la dieta de pánico post decembrino.

Fue una velada muy agradable en el pueblo que me vio nacer. Si conoces a Chimis sabes a qué me refiero, es una de mis primas más divertidas, ella es desinhibida, habla como quiere y le vale sorbete el protocolo. Si no conoces a mi prima Chimis, no sabes de lo que te has perdido.



Al terminar la cena nos fuimos a partir mi segundo pastel, con mil velitas y de Sanborn's, por supuesto. En la oficina me habían dado uno para partir con ellos y otro para llevar. Eso es vida. Las cosas simples. Hoy día, más que antes, agradezco todo lo que la vida me ofrece... desde la facultad para ver los volcanes nevados, hasta saborear una rebanada de pastel con mermelada de fresa.

Los demás días fueron de sol, mar y arena... días que no dejé de comer y beber cosas ricas, ni modo, ya iré al club a quemar lo bien comido y bien bebido. Días de mojitos, días de ver las olas ir y venir, días de calor rico, días de reírme con mis primos, días de jugar dominó cubano hasta bien entrada la noche, días de volver a trotar en la playa y yo que pensaba que ya no estaba para esos trotes... se me hace que me voy a inscribir para la carrera de Imagen, son sólo 10 Km., total... en una de ésas hasta un maratón me aviento.

Este 19 de febrero recibí muchas llamadas de gente que me quiere, mi teléfono móvil no dejó de sonar con mensajes entrantes a mi correo electrónico o a mi página en el feisbú. Qué grato recibir palabras tan bonitas dirigidas a mi persona, tantos besos y abrazos virtuales, tantos besos y abrazos reales. Qué grato saberme tan querida y apreciada. Este 19 de febrero fue especial porque cumplí 45 años y los celebré en mi tierra, en mi muy adorado Acapulco...

Algún día viviré allá, de eso estoy segura...

Ya lo decreté... uno de estos días mi deseo se hará realidad...

miércoles, 17 de febrero de 2010

Te Voy A Contar Un Secreto... pero no se lo digas a nadie ; )

Todavía recuerdo la cara que puso Katherine, colega gringa de hace muchos años, cuando Javier, colega mexicano de hace muchos años, tuvo la ocurrencia de preguntarle a la mujer cuánto pesaba su pelirroja humanidad. Ella no contestó nada, pero lo hirió primero con la mirada y luego lo fulminó aplicándole la ley del hielo. Javi, le dije yo después, nunca, jamás, ni por error se te ocurra preguntar a una mujer su peso, mucho menos su edad.

La edad y el peso son un tema tabú. Sobre todo el tema de la edad. Las mujeres -y también algunos caballeros que conozco por ahí- no queremos que el mundo sepa cuándo llegamos a él. Nos resistimos al paso de los años, hacemos lo que sea necesario para combatir y ganarle la batalla al tiempo. Pero el muy cabrón no perdona y con el tiempo, el tiempo hace mella.

Hoy compartiré contigo un secreto...

Pero primero veamos acontecimientos ocurridos en 1965, un año de buena cosecha...

Muere Churchill; Lyndon B. Johnson promulga la ley que da derecho al voto a los negros; en Reino Unido se prohibe la publicidad de cigarros en la televisión; Dylan lanza al mercado su elepé "Highway 61 Revisited" que contiene "Like a Rolling Stone", una de mis canciones favoritas y los Beatles, por su parte, publican sus discos "Help"" y "Rubber Soul", este último incluye "In My Life" y "Norwegian Wood", otras dos de mis canciones favoritas; astrónomos japoneses descubren el cometa Ikeya Seki; los marines llegan por montones a Vietnam; Tokio se vuelve la ciudad más grande del mundo, Nueva York queda en segundo lugar; nacen los grupos The Doors y Pink Floyd, mueren Nat King Cole y Malcolm X; en Francia se presenta el modelo del avión supersónico Concorde; se estrena "Doctor Zhivago" con Omar Sharif (Yuri Zhivago) y Julie Cristi (Lara), historia de un amor imposible, escrita por Boris Pasternak; Roman Polanski presenta su película "Repulsión", estelarizada por Catherine Deneuve, en el papel de una mujer obsesiva y trastornada de la cabeza; llega a las salas cinematográficas "Help!", segunda película de mis adorados Beatles; Margarita Gómez de la O se convierte en madre de Lily Valentina...

¡¡¡¡¡¡Así es!!!!!! En unos cuantos días de este 2010 cumpliré un lustro más de vida ó 45 años de edad.

Oh My God! -con tono de voz del personaje Janice que salía en Friends-.

Quienes me conocen bien y no tan bien, opinan que a mí los años me hacen los mandados, pero te aseguro que mis células sí están conscientes y de vez en cuando ellas me ayudan a recordar que yo nací en 1965, un año de buena cosecha.

Hoy día yo ya estoy más allá del bien y del mal. Hay muchas cosas que ya no me dan pena, como escribir lo que pienso y lo que se me ocurra en este espacio, por ejemplo; tampoco me avergüenzo por llorar por lo que sea... o por confesar cuántos años tengo. Y si me da pena, me la aguanto...

¿Ya ves que sí soy bien macha?

martes, 16 de febrero de 2010

Si Lo Sabe Dios, Que Lo Sepa El Mundo

No sé si serán las hormonas, últimamente más locas que lo acostumbrado... o si será la bola de años... o la incipiente primavera, lo cierto es que frecuentemente aparece en estos ojos negros que poseo, o en uno solamente, la lágrima trémula, como la que derramaban Remy, Heidi o Candy Candy en aquellos programas trágicos de dibujos animados que pasaban hace algunas décadas -todo tipo de desventuras vivían estos pobres chiquillos-.

Si es una película de final feliz, lloro. Si es un filme de final no feliz, como los del cine francés, chillo. Si es un comercial, a mi juicio "tierno", sollozo. Si se trata de palabras, a mi juicio "lindas", dirigidas a mi persona, la lágrima me traiciona. Si se trata de palabras, a mi juicio "no tan lindas", dirigidas a mi persona, aparece el llanto.

Si se trata de la lectura de algo, a mi juicio triste, como cuando Tomás decide darle una muerte digna a Karenin, pues el tumor extirpado no erradicó el cáncer del perrito, el cual con todo y enfermedad jugaba con sus dueños, se me desbordan los ojos de lágrimas. Por cierto, para Tomás los juegos de Karenin eran su sonrisa. Bueno, chillo y berreo cuando vuelvo a leer este pasaje de "La Insoportable Levedad del Ser".

Si se trata de la escena en la que Ross y Rachel se besan por primera vez en "Central Perk", con un tema de U2 de fondo, que en este momento no recuerdo exactamente cuál es, lloro de emoción. Si se trata de mirar a la pareja de alemanes que compitió anoche en patinaje artístico en las olimpiadas invernales, se me enchina la piel de los antebrazos y pantorrillas y lloro, al ser testigo de tal poesía en movimiento.

Si se trata de pensar en la miseria que abunda en este planeta, en la hambruna y en las personas que viven en Haití, me conmuevo, lloro de tristeza y frustración.

Es un hecho, soy una máquina de lágrimas humana, lloro mucho, lloro poco, lloro cuando es necesario, lloro sin pena, mostrando mis sentimientos. Ya ni me seco las lágrimas al final de la película triste... total, si lo sabe Dios, que lo sepa el mundo.

lunes, 15 de febrero de 2010

La Mujer Moderna

Este fin de semana llegó a mi correo electrónico el monólogo sobre la mujer moderna que pronunció Adela Micha, me imagino que en su programa radiofónico, no se especificaba la fuente. A mí ella me cae bien porque dice lo que piensa, pero me parece que su carrera periodística se sustenta más en la pose que en las ideas.
Su mensaje antifeminista iba dirigido a "las mujeres inteligentes, realizadas, liberadas y abandonadas" así como a los hombres, "confundidos porque no saben qué papel desempeñan en la sociedad, huyen de las mujeres, antes ellos nos mantenían y ahora nosotras los mantenemos a ellos, a ver si les cae el veinte y se dan cuenta de que necesitamos el apapacho y aunque sea una llamadita al celular".
Para la Micha las mujeres estamos actualmente en el calabozo de la soltería crónica aguda y nos estamos perdiendo de la comodidad en la que vivían nuestras abuelas, en aquellos tiempos en los que tenían una runfla de hijos y se dedicaban a bordar, podar las plantas, cocinar y abanicarse en el patio mientras echaban el chal con sus amigas.
De acuerdo a la locutora las mujeres nos echamos la soga al cuello desde que las precursoras del movimiento feminista decidieron quemar los sostenes y reivindicar nuestros derechos. En su opinión, gracias a brujas tan malditas, con sus grandiosas ideas, ahora tenemos que levantarnos temprano, salir a trabajar, educar a los hijos, mantenernos económicamente, matarnos de hambre para vernos flacas y usar toda clase de remedios para estar bellas y sin arrugas.
Fíjate que los lunes estaría de acuerdo con la Micha, verdaderamente me da flojera levantarme para ir a trabajar y realizar las rutinas cotidianas. Sí, los malditos lunes quisiera quedarme en mi camita hasta tarde, no tener que salir de la casa y manejar en el tráfico; quisiera no bordar, pero sí marmotear a gusto; quizás sí podar las plantitas, oler las flores, tomarme mi café mientras leo los mitotes del facebook, ver muchas pelis y leer novelas con historias cargadas de imaginación.
Pero de martes a domingo prefiero ser una mujer, como dice ella, inteligente, realizada y liberada pero en absoluto abondonada o sola. No renunciaría a mi puesto de mujer moderna por muy atractivo que pueda parecer el rol de las abuelas que la Micha refiere. ¿Y lo de hacer lo imposible para verme bien? Por Dios, eso no me preocupa para nada, vanity is my favourite sin!
Con todo y la flojera que me produce levantarme los lunes, no cambio mi rol de mujer trabajadora y activa, ni considero que la independencia esté reñida con la vida de pareja. Creo que el hombre inteligente no le huye a una mujer con ideas. No creo que el papel del hombre sea el de mantener a la mujer, ni el de ésta sentarse a recibir.
A lo mejor es cierto que ahora se nos ha complicado más la vida, sobre todo a aquéllas que tienen hijos, pero la posibilidad de decidir, ir y venir que nos da la independencia económica, no tiene precio, aunque suene a comercial.
Es mi punto de vista, ¿tú qué prefieres?

jueves, 11 de febrero de 2010

Tengo Miedo!!!!!

Yo creía que era bien macha, no por tener atributos masculinos, quienes me conocen bien y no tan bien, saben que peco de vanidosa y femenina. Me creía bien macha porque aunque sintiera temor frente a retos nuevos yo los enfrentaba con valor y coraje. La vida me ha enseñado a ser así. A veces me ha tocado transitar por caminos pedregosos y, con todo y rasguños, he llegado a mi destino en una pieza. Sin embargo, hoy tuve miedo.
Aborrezco este sentimiento. Esta mañana tocó a mi puerta y no pude hacerme la loca, fingir demencia, hacer como que no estaba ahí, total, que siguiera tocando, ya se cansaría. Pienso que el miedo es muy humano, no porque sea misericordioso o magnánimo, sino porque es un sentimiento muy presente a lo largo de nuestra vida. Quien no haya sentido ningún tipo de temor, que tire la primera piedra.
Tenemos miedo a morir, miedo al cáncer, miedo a que los hijos enfermen de gravedad, miedo a que nos asalten o secuestren, miedo a quedarnos sin trabajo, miedo a casarnos, miedo a divorciarnos, miedo a no casarnos nunca, miedo a hablar en público, miedo a hacer el ridículo, miedo a la vejez, miedo a la soledad, miedo a estar mal acompañados, miedo a fallar, miedo a las alturas, miedo a los elevadores, miedo a la oscuridad, miedo a reprobar, miedo a ser felices, miedo a vivir, le tenemos miedo al miedo.
El miedo que hoy me dio es el miedo al cambio, lo único constante. Reportaré a un jefe nuevo, lo cual implica nuevos retos, nueva personalidad por conocer, nueva forma de trabajar, nuevas oportunidades. Este cambio es emocionante y estimulante, sí, pero no deja de darme mucho miedo.
Pasado el shock comienzo a asimilar la noticia, el miedo paraliza y yo no tengo tiempo, ni ganas, de quedarme estática. Respiro profundo varias veces y me armo de valor, comienzo a sentirme otra vez muy macha, lista para enfrentar lo que venga : )

miércoles, 10 de febrero de 2010

Confiésome Cursi

El próximo domingo es el día de mi santo, pues Valentina me habría nombrado mi madre de haber nacido el 14 de Febrero. No fue así. Yo estaba tan cómoda en tan cálida morada que decidí quedarme ahí algunos días más.

El domingo será también el Día del Amor y la Amistad, celebración que muchos piensan es producto de la mercadotecnia y de empresarios exitosos como Don Hall, el casi inventor de las tarjetas de felicitación.

Posiblemente es bien cierta tal aseveración y efectivamente, compañías como Hallmark venden muchas tarjetas este día, pero los beneficios no son sólo económicos y de ayuda para las miles de personas que vivimos de comercializar tan nobles productos.

Les prometo que a las mujeres -por lo menos a mí- nos encanta y vuelve locas de alegría el recibir detalles de la persona que amamos, no sólo en este día tan comercial, sino los 365 días del año.

Yo me confieso ante ustedes hermanos, como una cursi y romántica incorregible. Estoy enamorada del amor en todas sus manifestaciones, TODAS. También adoro los apapachos, flores, chocolates, tarjetas con palabras bonitas, globos, monos de peluche y cuanto chuchuluco me prodigue MV. Bueno, ok, reconozco que también me siento halagada y conmovida cuando me regala esas cosas tan lindas que hace Swarovsky : )

Querido lector del sexo masculino, dale un detalle este 14 de Febrero a la mujer de tu vida o a la que te trae pateando chayotes sin zapatos. Te prometo que no falla, la harás feliz a ella... y seguramente ella te hará feliz a ti. Y si tú, querida lectora del sexo femenino, no acostumbras dar detalles, prueba a ver qué pasa y luego me cuentas.

Eso sí, no olvides acompañar tu detalle con una hermosa *Tarjeta Hallmark, la tarjeta que regalas cuando quieres que sepan que es de corazón... ; )

*Elemento indispensable para que la fórmula amorosa funcione.

lunes, 8 de febrero de 2010

Michi y Michi

Anoche tuve insomnio intermedio. ¿Y qué demonios significa eso?, estarás pensando. Pues bien, este tipo de insomnio es aquel en el que despiertas intermitentemente y logras dormir como tres horas, si bien te va.
No sé si tuve tal trastorno del sueño por algún tipo de problema de ansiedad o se trató simple y sencillamente del estrés dominguero por la pronta llegada del mentado lunes.
Sinceramente espero que se trate de este último y no de un trastorno de ansiedad manifestándose a través del insomnio.
El caso es que durante alguno de mis tantos madrugadores despertares de anoche, por alguna extraña razón, vino a mi en ese momento ocupadísima mente, un comentario que escuché alguna vez: "Mi vida durante la infancia fue color de rosa". Y luego vino a mi mente la contraparte a este comentario, el escuchado en otra ocasión, proveniente de otra persona: "La vida es una montaña de problemas".
"Ajá", me dije a mí misma anoche cuando estos pensamientos se atropellaban en mi cabeza: "Y yo, cuando era chiquita, creía que si tomaba con mi mano un enorme racimo de globos blancos volaría por el cielo y vería el mundo desde arriba".
Difiero de las aseveraciones de estas personas porque mi vida ha tenido matices, ni ha sido siempre rosa, ni se ha inclinado completamente hacia el lado oscuro de la balanza. En mi haber tengo un recuento de días que han ido de la gama del rosa más pálido al rojo más intenso, así como otros menos coloridos acercándose más a tonos sepia, similares a los del árbol taciturno que pintó Annie cuando se encontró sola, afligida y desesperada en la película "Más Allá de los Sueños" (What Dreams May Come, 1998).
Y como los pensamientos en la madrugada, y también no en la madrugada, brincan incansablemente de una idea a otra, recordé entonces la escena final de este filme, la cual me conmovió hasta la lágrima en el ojo, cuando Annie y Chris, almas gemelas, se vuelven a encontrar en este mundo, ahora en los cuerpos de una niñita y un niñito.
La chavita le comparte al chavito la mitad de su sandwich de peanut butter and jelly... "50/50" ó "michi y michi" como pienso yo deben ser las cosas entre dos que se aman en esta vida y por qué no... en quién sabe cuántas más...    

viernes, 5 de febrero de 2010

Noche Mágica

Hoy te quiero compartir algo que encontré en el baúl de los recuerdos. Es algo que escribí hace algunos años, anédotas de cuando iba al antro con mis primas y amigas...

Son las 7.30 pm y estamos mis primas, amigas y yo en la diminuta recámara disfrazándonos, perdón, arreglándonos para ir al antro. El tocador es zona de desastre con todo tipo de menjurjes y chuchulucos fabricados por esas empresas que saben cómo hacer para que algunas mujeres compremos compulsivamente. Llevo media hora esperando que Ceci suelte la secadora o que Papas por fin me pase la tenaza mientras Maggie le para los pelos con "super punk" a Chimis.

Encima de la cama hay prendas negras y un montón de accesorios, desde faldas de licra, tops, guantes y medias de encaje, moños enormes para decorar la cabeza, como mil quinientas docenas de "gummies", crucifijos de todos tamaños para colgarnos en las orejas y cuello, doscientos ocho collares de perlas para el toque final del atuendo madonnesco. En el suelo están regados varios pares de botines negros, como los que usaban las abuelas, super moda del momento. Son los ochenta y no hay nada mejor que ir al Magic Circus o Circo Mágico cada fin de semana, imposible llegar el lunes a la escuela y decir que no fui al antro, primero muerta que nerd.

Mientras nos maquillamos como payasos y nos paramos bien los pelos con el "super punk" comienza la hora de los "drinks" para consumir menos en el antro, además, nunca se sabe, ¿qué tal si nos ligamos puro tipo codo que ni para una cubita le alcanza? Bueno, ya quedamos que si los fulanitos resultan codos los mandamos derecho a la fregadita, con todo y zapatillas de ballet. Así que, por si acaso eso sucede, que empiecen de una vez a circular los "muppets" y como muppets comenzamos a ponernos.

Una vez listas salimos como desfile de "Madonnitas" y llegamos al Circo Mágico, cuya entrada está atiborrada, como siempre. Ni modo, a saludar al naco cadenero como si fuera nuestro amigo del alma para que nos permita un rápido acceso: "Somos ocho niñas", le digo toda sexy y sonrisas al tipo, quien, después de hacerse del rogar durante un rato, por fin nos abre las puertas del cielo y nos ubicamos en mesa de pista, por favor.

Observo a mi alrededor y veo que esta noche han venido al paraíso niños y niñas aparentemente bonitos, dudo de su belleza porque las luces y penumbra camuflajean la realidad. Algunos ya consiguieron alcanzar el estado etílico, otros trabajan en ello, nosotras ya andamos medio jarras; hay los que andan dando vueltas para ver qué hay, las huilas ya están trepadas en las jaulas para perpretar sus danzas, algunas -la mayoría, por supuesto- están como posando para la foto, pero en un ratito se les quita lo evenflow, en cuanto se tomen unos "muppets" se les bajan los humos y otras cuantas cosas más.

Está de moda Orchestral Manoeuvres in the Dark, Duran Duran, Billy Idol, A Flock of Seagulls, U2, entre otros, y en cuanto el DJ ponga "Secret" me pararé en friega para tratar de bailar en la pista atiborrada de fresas que danzan alegremente, mientras en los pasillos oscuritos no faltan los que se dan un toque, se meten un pericazo o se echan un fax.

Una de mis primas ya se ligó a un wey, bien pinchito, me digo a mí misma, con la esperanza de que el wey feo tenga amigos guapos y no codos. Pero "Oh, decepción", sus cuates están igual de feos y seguro son codísimos. Hora de decirles bye.

Para no aburrirme me fumo un Marlboro rojo como vil chacuaco y le tomo a mi cuba que sabe a gloria. Una de las amigas de mi hermana ha consumido varios tequilas y me solicita que la escolte al baño porque la dama desea vomitar. Genial, pienso mientras apago en el cenicero el décimo cigarrillo de la noche. Y ahí vamos las dos, rumbo al baño de niñas, recinto donde se cuentan varias historias.

El viejerío se retoca el maquillaje ya todo corrido, una que otra se mira en el espejo sintiéndose la super reina. Algunas viborean de reojo, las más directas se barren las unas a las otras, de pies a cabeza. No falta la que lleva media hora vomitando y las amigas andan consiguiendo hielo "para bajarle la peda". También está la ebria que atraviesa por la fase de la depresión y bañada en llanto le cuenta a su amiga de toda la vida que su novio la mandó al carajo.

Está también la muy feliz, que presume haberse "ligado a un niño monísimo que besa de pelos". Está la no muy feliz que cuenta que no le ha bajado en dos semanas y no sabe qué hacer mientras sus amigas le recetan todo tipo de remedios y alternativas.

Afuera de este confesionario rondan los buitres armados del valor conferido por el alcohol consumido. Tienen listo su "choro mareador" para ligarse a una Madonnita:
Estás guapíssssssimmmmma.
Nunca había conocido a una reina como tú.
Te juro que mañana te llamo.
Con una niña como tú, me caso pero ya.
Ya te extraño.
Me encantas.
¿Por qué no te había conocido antes?

Lamentablemente algunas niñas compran el "verbo convencedor" creyendo haber encontrado al príncipe encantado... y no es el príncipe, pero sí está encantado de saber que en unos minutos más disfrutará de una noche mágica.

Ahora estoy en mi recámara, en la cama voladora, bajando una pierna para hacer tierra. Miro el techo en la mareadora oscuridad, siento un gran vacío existencial sin saber que dentro de 17 años pensaré que la pinche Madonna nos timó pues es ya toda una señora, madre de dos criaturas, que va en su miniván a la Walmart, cantando "Bye, Bye, Miss American Pie"...

¿Y sabes qué más? La mayoría de las Madonnitas de aquel antro y de aquellos tiempos hacen ahora exactamente lo mismo : )

martes, 2 de febrero de 2010

Creo Que También Alucino Los Martes...

Hoy no es lunes pero como si lo fuera porque ayer no trabajamos en Mexicalpán de las Tunas. Es martes pero lo estoy alucinando como a los lunes. Otra vez hace un frío maldito y resulta una pachanga levantarse de la cama y meterse a bañar. Pero más que pachanga es un suplicio despojarse de la pijamita caliente para entrar a la ducha y una tortura salir del agua caliente para vestirse. Los pingüinos serían felices en las casas de esta ciudad y lo serían mucho más en esta oficina que es prácticamente Siberia. Arribó febrero más loco que nunca, nublado, frío y lluvioso. Espero que no sea señal del temperamento que prevalecerá entre los nacidos en este mes, sobre todo para los que llegaron bajo el signo de Piscis... Lo espero por mi bien y por el de todos los que conmigo conviven : ) Espero también que estés disfrutando un martes feliz, sin alucinarlo como sólo yo sé hacerlo...

lunes, 1 de febrero de 2010

La Felicidad Es Muy Simple

Pienso que las cosas simples son las que construyen la vida y ayer fue uno de esos días en los que mi vida agregó algunos ladrillos de felicidad. Una tarde agradable en casa de Terry, Ceci y mis adorables sobrinos, como el título de aquella serie setentera que pasaban en la televisión. Vinito tinto, tarde nublada y fría, comimos informalmente, sentados alrededor de la mesita de la sala, una paella comprada en La Europea, ensalada de lechuga con aderezo de pimiento morrón con ajo y aceite de oliva, preparado por Terry, jaibas rellenas y de postre mi famoso helado bañado de chocolate derretido, nueces caramelizadas, arándanos y cerezas. En esta ocasión faltaron las cerezas porque se me acabaron y no las he resurtido, pero no faltaron anécdotas, historias y recuerdos compartidos. Hubo asimismo la oportunidad de subir a tribuna y compartir con Ceci experiencias similares a raíz de nuestra cirugía de lo mismo, casi al mismo tiempo, el año pasado. Conversamos sobre música y aquellos programas radiofónicos que escuchábamos en los ochenta. ¿Recuerdas "Noche Mágica" en WFM o el pavo asesino de Rock 101? Platicamos también sobre películas, Ceci y yo somos fans de las de Tarantino, pero no quiso que le contáramos nuestra muy  conocedora crítica sobre "Inglorious Bastards" (Bastardos Sin Gloria), no ha tenido tiempo de verla, quiere disfrutarla sin contaminación de ideas ajenas. Baby face y yo habíamos visto la noche anterior "True Romance" (La Fuga), con Christian Slater y Patricia Arquette, filme cuyo guión fue escrito por Tarantino. Diálogos, situaciones, filosofía y "moral" Quentinesca en todo su esplendor. Disfruté la película como mi niña interior en Disneylandia. Y hablando de niños, mi sobrina Ximena me hizo muy feliz al pedirme que sea su madrina de primera comunión, invitación que acepté con gusto y entusiasmo, aun cuando yo me había prometido y casi jurado no volver a ser madrina de nada porque me chocan las pláticas a las que todo padrino y madrina deben ir para recordar los sacramentos de la iglesia. En fin, por sobrinas que adoro soy capaz de chutarme las pláticas que sean necesarias. Y siguiendo con el tema de niños, mi sobrino Coby es un chavito genial, sonríe ampliamente mostrando sus pocos dientitos cuando su papá le canta el tema musical de "Two And a Half Men". Estos dos eventos hicieron mi tarde de ayer y la tarde de hoy también estoy contenta, escuchando a Barry White, marmoteando en mi computadora, MV trabajando en la suya, Kana echada en su tapete, saliendo de vez en cuando al chisme cuando los perros de los vecinos ladran. La vida es bella, aunque a veces la miopía me nuble la visión.