lunes, 30 de mayo de 2011

Muy Parecido Al Amor

De menos a más...

A un ritmo cadencioso...

Primero cada loco con su tema...

Libres...

Y de pronto la armonía...

Entregados...

Los del escenario...

Y los de las butacas, también...

Mucho calor...

La voz de Lisa Fischer, sublime...

Baterista, guitarrista, violinista y bajista, amantes de sus instrumentos y de lo que con ellos hacen...

Chris Botti, si antes me gustabas ahora te amo...

Y llegó el clímax con "Nessun Dorma"...

Oleadas de placer sentí desde las pantorrillas a los muslos...

La lágrima de emoción al escuchar, con toda mi petite humanidad, "The Look of Love"...

Una noche para recordar...

Un domingo para no olvidar...

Músicos apasionados...

Voz y trompeta hacen el amor...

El hombre elegante, de principio a fin... 


lunes, 23 de mayo de 2011

Consecuencias De Una Malsana y Adictiva Relación

Ir por la vida involucradas en una malsana y adictiva relación con nuestros hermosos zapatos de tacón puede tener sus consecuencias...

Más de una vez azotamos en la vida... Más de una vez nos perdemos de caminar un poco más allá de nuestra vista... porque los zapatos nos están matando de dolor... Más de una vez nos tropezamos... y con la misma piedra... Más de una vez nos enterramos en el pasto... Más de una vez el tacón se queda enterrado y caminamos sin zapato con todo y la pena... Más de una vez caminamos como si estuviéramos en la cuerda floja... Más de una vez nos desequilibramos... Más de una vez nos resbalamos... Más de una vez nos desplomamos... Más de una vez nos derrumbamos... Más de una vez salimos con los zapatos en la mano... Más de una vez nos quedamos sentaditas... Más de una vez recurrimos a los curitas para sanar nuestras heridas en los pies... Más de una vez lamentamos haber gastado tanto dinero en esos malditos zapatos que lastiman... Más de una vez los usamos solamente una vez... Más de una vez hubiéramos preferido llevar los no tan lindos pero sí comodísimos y accesibles zapatos Flexi, los cuales, una vez más, se quedaron solitos en el fondo del armario.

Zapatos no aptos para masoquistas, son sumamente cómodos

miércoles, 18 de mayo de 2011

Tengo Una Relación Malsana Y Adictiva

La relación que algunas mujeres tenemos con nuestros zapatos es muy especial.

La mía sí lo es.

Es una relación de amor-odio.

Es una relación un tanto-mucho-muy enfermiza.

Es adictiva y a veces algo masoquista.

Mi vicio por los zapatos es incorregible.

Y tampoco quiero curarme de tal vicio.

No existe en el mundo grupo de apoyo, terapeuta o chamán que me lo quite.

Adoro los zapatos de tacón muy alto.

Amo los de aguja.

Puedo tener un desliz con los de plataforma.

Y tener una aventura con los de tiritas muy finitas... aunque me torturen a morir.

La vanidad puede más que el dolor.

La emoción de estrenar zapatos nuevos sólo la conoce quien conoce bien de este vicio tan sabroso.

Me vuelven loca los de animal print, los rojos, las alpargatas, los rosa, con lazos, sin lazos, los azules, con encaje, sin encaje, los plateados, los blancos, los de florecitas, los sin florecitas y los negros...

Los negros me fascinan.

Negros con punta, sin punta, con tacón medio, con plataforma, cubiertos, semidescubiertos, totalmente descubiertos.

Los hombres no comprenden nuestros motivos para tener tantos pares de zapatos negros.

Es algo que escapa por completo a su razón.

No entienden que los de tacón bajo van bien con los capri (¿qué es eso, estarás pensando en este momento mi querido lector del sexo masculino); que los clásicos cerrados de tacón alto hacen lucir la pierna más bonita y estilizada; que los de punta descubierta son divinos en verano; que las sandalias van muy bien con las bermudas; que necesitamos por lo menos 5 pares de botas negras con diferentes acabados para lucir con diferentes outfits.

Los hombres no alcanzan a entender nuestras razones para tener tantos pares de sandalias (¿qué es eso?)...

Y sí, confieso que la mayor parte del tiempo las mujeres vamos por la vida torturadas por una malsana relación con los zapatos de tacón.

Pero eso no importa.

Lo que importa es vernos divinas con nuestros hermosos zapatos de tacón...

Y nos verás caminando como si flotáramos en las nubes...

...aunque los deditos de los pies ya no aguanten y esperen con ansia loca la hora de quitarse los malditos zapatos de tacón.

Nada como unos hermosos zapatos de tacón mmmmmmmm


Placer culposo, los de animal print... como de güililla

Ayer compré unos como éstos y me siento soñada je je

Unos rojitos para encontrar el camino a casa... como Dorothy

...eran feítos pero seguro Dorothy estaba encantada con ellos... eso es lo importante...

lunes, 16 de mayo de 2011

Mis Amigos Los Psicólogos

Hace aproximadamente tres años entré, después de varios años de no haber puesto un pie en un aula escolar, a ese salón de clases en el cual había por lo menos 40 alumnos.
Era un sábado a las 10 am.
Seguramente iba de jeans, playera y lente oscuro.
Me senté del lado izquierdo del pizarrón, en la segunda banca, junto a no recuerdo quién.
La clase era Procesos Psicológicos Básicos I, impartida por la maestra Sarah Whateveritwas (apellido judío y díficil de recordar).
Su estilo y lo que de su boca salió me gustó.
Ese día entré siendo una persona diametralmente distinta a la que ahora soy.
La Psicología ha cambiado mi vida.
Para bien.
Ha sido un proceso psicodramático.
Me sacudió de adentro hacia afuera y al revés.
Muchos demonios han sido expulsados de mi psique... y otros más aún revolotean por ahí.
Son tercos. Como yo.
La Psicología me cambió a mí y mi forma de ver la vida.
Aún me faltan algunos créditos para terminar la licenciatura y segura estoy no desistiré.
La meta se vislumbra ya.
Pronto llegaré.
El sábado pasado tocó tomar la foto de los graduados de dos generaciones, la mía y la que va un cuatrimestre atrás.
He asistido a clases con personalidades diferentes y de diferentes generaciones.
El sábado pasado que vi a algunos de mis compañeros, amigos y confidentes, sentí bonito.
Me di cuenta lo importantes que han sido en mi vida durante los últimos tres años y medio.
Y me dieron ganas de llorar.
Llorar de emoción.
Es por eso y por el sol que yo insistía en usar mis gafas super fashion.
Alejandra Martínez Cranss, mujer inteligente, siempre aportando datos interesantes a la clase. Gracias por compartir tu sabiduría.
Marita Núñez, niña aún para mí por tu corta edad, comprensiva y oportuna, estuviste ahí cuando más me hacía falta escuchar esas palabras que me dijiste aquella vez a la hora del receso. ¿Lo recuerdas? Quizás no, pero tu mensaje fue significativo para mí.
Iván Lozano, te recuerdo en las primeras clases como el chavo nerd, conocedor de Freud y sus teorías.
Ruth Vélez, cómo me divertí en casa de tu mamá cuando ensayábamos para aquella obra de teatro llamada "Nadiana" cuyo tema trataba sobre la agresión transgeneracional.
Damaris Campos, conocí tu sensibilidad hasta ese día en la comida en el club de golf La hacienda. Lamento no haberlo hecho antes.
Isabel Martín del Campo, nunca olvidaré aquel receso durante el cual compartimos sobre nuestras emociones.
Pris Albarrán Carriedo, la niña alta que prendía la luz, la niña de los diez.
Xochitl Enríquez, temperamental, inteligente, ingeniosa... si no me importaras no me hubiera importado... pero ese puente afortunadamente ya lo hemos cruzado. Eso es bueno.
Tania Chávez, la niña de la cara bella, la que se puede poner lo que sea, bella es. Guapa e inteligente caray.
Eva Cinta, te recuerdo como la niña calladita y santurrona en aquella clase que nos daba Sarah... y ahora eres otra, te has soltado el pelo.
Lily Flores, las dos hemos padecido de lo mismo y fue entonces cuando nos acercamos y fuimos más amigas.
Carolina Arias, estuvimos juntas en Psicopatos II. La güerita fashion a las 7 am. Te conocí mejor aquella noche que nos fuimos a cenar al Sanborn's al salir de clase.
Vero Ferriz, ¿te acuerdas cuando comenzaste tu relación con Iván? La bola de viejas sentadas en las bancas atrás de ti. Las amigas de Iván. ¿No tuviste miedo? Eres una niña hermosa, prudente, observadora, analítica, toda una psicóloga.
Zoé Juárez, a ti te conocí en Psicopatos I, cuando andaba que me cargaba la fregada. Un día me regalaste una tableta de chocolate amargo para endulzar mi corazón. Desde ese día yo te quise mucho más.
Merly de los Ríos, la de los ojos muy claritos y bonitos. Poco te traté pero mucho me animaste, sobre todo aquel día en la fila del café cuando me preguntaste por mi estado de salud.
Ale Castellanos, no hemos sido confidentes pero no sabes cómo me han hecho reír tus comentarios en la clase, sobre todo en la de Psicología de la Sexualidad.
Rayo, fue contigo con quien platiqué en aquella primera clase de la miss Gaby, Procesos Psicológicos Básicos II y luego nunca más volvimos a cruzar palabra.
Miss Gaby, una maestra muy querida.
Hugo Valdivieso, hombre tranquilo, callado, observador y prudente. Una persona bien que me cae muy bien.
Amigos míos, cada uno de ustedes ha aportado algo a mi vida en los últimos tres años.
Ha sido un privilegio compartir con ustedes esto de la Psicología y algunas otras vivencias más.

Un Privilegio Ser Parte De Este Grupo

viernes, 13 de mayo de 2011

Mi Amiga Sin Nombre Y Sus Hippies Progenitores

Hoy escuché "Angel Of The Morning" a través de la magnífica voz de Chrissie Hynde (The Pretenders).

Mi mente se trasladó ipso facto al pasado, se fue hasta aquel día en el remolque de los papás hippies de mi mejor amiga de la cual no recuerdo su nombre.

La mamá de mi amiga sin nombre usaba faldas largas y flores en su lacia cabellera.

Su papá, o novio de su mamá, llevaba una larga barba y tocaba la guitarra.

En el pequeño remolque había siempre un tiradero espantoso. Desde chiquita yo era "toc toc" y no soportaba el desorden de una casa.

Era preferible sentarnos afuera, sobre el pasto, para respirar el aire puro del bosque. Supongo, y digo supongo porque no recuerdo, que los señores padres de mi amiga sin nombre fumaban marihuana, mariguana o cannabis... es lo mismo.

Recuerdo vívidamente el día que su papá, o marinovio de su mamá, tocó esta canción con su guitarra y la mamá de mi amiga sin nombre la entonó con una voz maravillosa.

Pero nunca tan maravillosa como la voz de Chrissie Hynde, ante quien me quito mi hermoso sombrero de paja que me cubre el rostro de los rayos del sol.

Chrissie Hynde - The Pretenders - de las mejores voces femeninas


Así era la mamá de mi amiga sin nombre

miércoles, 11 de mayo de 2011

Profecía Cumplidora

Una vez más compruebo la factibilidad de las profecías autocumplidas.

Viernes, último día de tomar 1/4 de tableta antidepresiva... más efecto placebo que otra cosa.

Y una semana antes me fui autoprogramando.

¿Qué pasará ahora que deje de tomar estas drogas?

¿Me sentiré mal?

¿Regresará el vértigo?

¿Me pondré triste?

¿Decaerá mi estado de ánimo?

¿Me sentiré sin energía?

¿Lloraré por cualquier motivo?

Se lo comenté a mi terapeuta.

Le externé mi pavor ante la sola idea de dejar mi placebo.

Me alentó a no sentirme así. A mandar al demonio mis inquietudes. Lo del demonio es cosa mía, por supuesto.

El sábado ya no tomé la microcantidad de antitristezas.

El domingo todo bien.

El lunes más o menos bien.

Fui al gym tempranito por la mañana y al regresar a casa me tiré en la cama y me quedé dormida.

La presión arterial en el piso.

Las ganas de levantarme estaban muy lejos.

Lunes fatal, martes otro tanto.

Hoy es miércoles y me siento atarantada, la cabeza parece sonaja y no tengo vértigo pero sí algo muy parecido.

Yo creo que iré a visitar otra vez a mi Dr. House...

Me purgan las autoprofecías que se cumplen.

Si quieres que algo se cumpla piénsalo mucho, con todo tu ser...

Y ya verás lo que ocurre, pero por favor sólo pide y piensa lo que verdaderamente quieres que ocurra.

Un abrazo para ti, dondequiera que estés.

miércoles, 4 de mayo de 2011

La Razón Vs. El Hombre Mediocre


Hoy comparto contigo un ensayo que escribí para la materia Psicología de la Educación. 
Este ensayo invita a una reflexión en torno a los métodos de enseñanza planteados en la película La Sociedad de los Poetas Muertos (1989), basada en la obra original de Nancy H. Kleinbaum, adaptada al cine por Tom Schulman y dirigida por Peter Weir.
“Carpe Diem: Vivid el momento. Coged las rosas mientras aún tengan color pues pronto se marchitarán. La medicina, la ingeniería, la arquitectura son trabajos que sirven para dignificar la vida, pero la poesía, los sentimientos, son lo que nos mantiene vivos”.
John Keating / La Sociedad de los Poetas Muertos
Carpe Diem, locución latina acuñada por el poeta Horacio, la cual significa Aprovecha el día, son las dos palabras clave transmitidas por el profesor John Keating (Robbin Williams), a sus alumnos del conservador colegio Welton en el año de 1959.
El modelo educativo tradicional es el que se aplica en el prestigiado instituto de alumnos provenientes de familias pertenecientes al nivel socioeconómico alto.
Tradiciones y ritos conforman la estructura del colegio Welton. Sus cuatro pilares son: “Tradición, Honor, Disciplina y Grandeza”, conscientemente tergiversados por los alumnos del profesor Keating a: “Travesura, Horror, Decadencia y Pereza”.
Los profesores son severos, rígidos, exigentes y de pensamiento conservador.
Los padres de los alumnos, también.
Las herramientas de enseñanza comunes en esta institución son los libros y el pizarrón. La concepción del maestro, el que dirige y enseña conforme al programa establecido.
Es el paradigma conductista el aplicado en este colegio.
La concepción del alumno: un ente pasivo.
Es obligación del mismo acatar las reglas y cumplir con la disciplina establecida. Cualquier falla en su comportamiento es castigado.
La preocupación primordial del alumnado son las notas escolares, no así el aprendizaje significativo.
En la gran mayoría de las intervenciones realizadas por los conductistas en el aula, los trabajos se orientan a fomentar en los alumnos la docilidad, el respeto a la disciplina impuesta y, por ende, la pasividad” (Winett y Winkler, 1972).
La memorización de los conceptos forma parte del programa de cada uno de los docentes con la excepción de uno, el profesor Keating, quien utiliza métodos en absoluto ortodoxos, remotamente apegados a los programas de estudio del colegio Welton.
Keating intenta educar a sus alumnos con valores opuestos a los de la institución. Está dispuesto a abrir las mentes de los adolescentes para inculcarles la libertad del pensamiento crítico y de ninguna manera las prácticas memorísticas.
De acuerdo con el paradigma psicogenético de Piaget, este profesor propicia el pensamiento formal en sus alumnos, los cuales están precisamente en la etapa del desarrollo idónea para estos fines.
Keating ofrece más que un pizarrón y textos, contenidos y elementos para ilustrar sus ideas. Los invita a arrancar las páginas de un libro, los lleva a los jardines para recitar poesías, los estimula para escribir, eleva su autoestima.
El maestro no sólo dirige, funge como mediador entre los contenidos y los alumnos. Ejerce su influencia en el desarrollo cognitivo de los alumnos, procesa el contenido y luego lo retransmite para que sea asimilado y no solamente memorizado (Hernández Rojas, 1998).
Keating intenta enseñar a los chicos a vivir la vida, que aprendan a mirar desde diferentes perspectivas. Los invita a visitar nuevos horizontes, a explorar y conocer. Apegado al paradigma psicogenético de Piaget, el maestro promueve el desarrollo psicológico y la autonomía del alumno.
Los métodos del profesor Keating son de corte psicogenético constructivista. De acuerdo a Lerner (1996), “las estrategias, las actividades y los procedimientos de enseñanza, en general, deberán estar encaminados a facilitar las actividades progresivas de reconstrucción del “saber a enseñar”.
Sin embargo, “tal trabajo de promoción y facilitación es difícil si no se cuenta con un marco de referencia constituido por el estudio minucioso de la psicogénesis de los distintos contenidos impartidos en la escuela” (Hernández Rojas, 1998)
El profesor Keating no tiene cabida en una institución de corte tradicional. Los alumnos adolescentes de este colegio, provenientes de familias tradicionales y de pensamiento conservador, malinterpretan la libertad que intenta inculcarles el maestro.
El dilema de la libertad se presenta para ellos incomprensible. No saben cómo vivir la vida y hacerse responsables de sus actos. Ellos actúan efectivamente motivados por el dinamismo del maestro, pero aún más por sus impulsos de adolescentes. No saben, no les han enseñado ni los han alentado antes a tomar las riendas de sus vidas.
Considero que esta malinterpretación de la libertad de vivir la vida es simbolizado en la película a través del suicidio de Neil (Robert Sean Leonard), quien al sentirse frustrado por la oposición de su padre a su anhelo de ser actor, opta por liberarse de las ataduras.
Desde mi punto de vista, no se deben mezclar dos modelos educativos en una sola institución, mucho menos cuando ésta es de corte conservador y, tanto maestros como contenidos curriculares, van en línea con un paradigma definido y solamente uno de los profesores comulga con un paradigma “liberal”.
Ni uno ni otro paradigma están bien o mal. Simple y llanamente los dos no caben en la misma institución. Al profesor Keating le faltó decir a sus alumnos que el ejercicio del libre albedrío y la razón van de la mano con la capacidad de anticiparse a, o asumir, las consecuencias.
Mi crítica en contra de las escuelas tradicionales estriba en mi repudio a la manipulación de las personas por por parte de gobiernos e instituciones por el temor al libre pensamiento.
Es de las instituciones que desalientan o no alientan el pensamiento crítico de las cuales surge el hombre mediocre, aquél que solamente cumple reglas, como cordero tras el rebaño, sin capacidad de razonamiento, análisis, síntesis y juicio crítico.
Una perspectiva diferente...
El maestro más querido...