viernes, 16 de julio de 2010

Tiempo Detente

Nunca fui fan de Rush, banda canadiense que toca rock progresivo.

Bueno, ni siquiera había escuchado alguna de sus canciones. ¿Te parece una ignominia? A mí no. A Marco sí. ¿Motivo? Asevera que todo aquél que se considera un conocedor aprecia la música y las letras de estos cuates.

Por tanto, una vez que conoció mi ignorancia sobre la progresiva banda, se dio a la tarea de instruirme en el tema. Puso un cedé y luego otro y otro más. Las notas flotaban por toda la casa, el sonido iba y venía, las bocinas casi reventaban y pus nomás no me llegaba esta música al corazón ni sentía escalofríos en las pantorrillas.

Pensé, un poco angustiada, que era una frígida ante la música de Rush cuando de repente sonó una que tocó las fibras adecuadas... y puse atención a la letra... y Marco me contó los motivos por los cuales esta canción se había convertido en su favorita... y a medida que escuchaba más yo sabía que también pertenecería a mis top lists.

La rolita se llama "Time Stand Still" y llamó mi atención por el ritmo, pero sobre todo por lo que comunica.

Habla del tiempo, ése que se nos escapa como el agua que las manos difícilmente pueden contener. Insiste en su brevedad. Nos cuenta sobre la inocencia y su fugaz existencia en nuestras vidas.

Sobre el pasado nos recuerda es eso y nada más; nos reafirma la no necesidad de mirar hacia atrás, pero entre líneas nos refiere cuánto lo podemos llegar a extrañar, si no lo hemos abrazado con fuerza en su momento.

Situaciones, vivencias, experiencias, sensaciones, emociones son todas pasajeras y algunas quisiéramos se congelaran en el tiempo para vivirlas aunque sea un poquito más.

La letra me llega. Y seguramente me llega porque estoy en una etapa de la vida en la cual los niños crecen, los viejos se hacen más viejos y mis contemporáneos y yo, también.

Y como recomiendan los Rush, en esta etapa de mi existencia observo, me bebo, me embeleso y me empacho de todo lo que veo, toco, percibo, introyecto o aprendo...

...porque ahora sé cuán transitoria puede ser la vida.

 

No hay comentarios: