lunes, 23 de agosto de 2010

Consigue La Figura Soñada... ¡Muy Fácil!

En el tráfico de la escuela a la casa y sin mi Ipod a la mano, sin ganas de prender la radio porque no me gusta el shhhhschc que capta la señal y distorsiona el sonido, vinieron de pronto a mi cabeza varios sinsentido  muy comunes...

¿Si no soy niña bien, soy niña mal? ¿Y si no soy niña mal, soy niña regular, in between, ni tan tan ni muy muy? Además, ¿puede alguien ayudarme a definir los conceptos niña bien y niña mal? ¿Existen en el diccionario?

¿Por qué a la coca cola no de dieta le llamamos coca normal? ¿La de dieta es acaso anormal?

¿Por qué pedimos un café negro si el café es de color café?

¿Por qué preguntamos a quien trae aretes de brillantes si son de verdad? ¿O si son buenos? Son tridimensionales y tangibles ¿no? Por lo menos desde mi perspectiva o punto de visión son muy reales. Ahora bien, ¿por qué habrían de ser buenos o malos los zarcillos? ¿Acaso los pendientes pueden tener escala de valores no monetarios?

En esos sinsentidos y otras cosas más venía yo pensando en el maldito tráfico y recordé cuando Jano me decía que si el jabón aquel que anunciaban en la tele para quemar grasa al cabo del tiempo secaría la mano de quien lo usa... si quemaba grasa ¿cómo quedaría la piel? Pus también la eliminaría ¿no? Por lo menos eso entendía el sentido común de mi colega Jano.

El jabón "milagroso" que te ayuda a quemar grasa... ajá... como si eso fuera tan fácil...

Y entonces vinieron a mi mente algunos de los cientos de productos que vende CV Directo a través de comerciales en la televisión...

¿Qué tal el diet ring? Por $499 pesos te mandan un anillo y uno más de regalo (para que se lo des a quien tú aprecies de verdad), lo usas durante la noche y promete bajarás hasta ¡3 kilogramos en menos de 72 horas! Mediante la terapia magnética y de acupuntura en los dedos el anillo obra milagros.

Si quieres reducir abdomen, glúteos y cintura recomiendan lo coloques a la mitad del dedo. Ahora bien, para bajar grasa de espalda alta te duermes con el anillo colocado a la altura de las uñas. ¿Y si quiero adelgazar los pies me lo pongo como un anillo normal?

No puede ser.

Pero hay quienes sí lo compran.

Y la cosa no para ahí... veamos el Step Gym. Por $1,359 pesos tienes un par de tenis con los que tendrás la figura que siempre soñaste... vientre plano, glúteos levantados y pantorrillas tonificadas... y eso no es todo... los horrorizapatos hasta te componen la columna...

Y hay quienes ya tienen la colección completa de los zapatos mágicos.

¿Y la celulitis? Ah! eso lo resuelve el famoso Bío Shaker. Por $4,799 pesos es tuyo este aparatito en el que te subes y dejas sacudir un rato. Eliminarás grasa, bajarás de peso, reducirás la celulitis y hasta fortalecerás la densidad ósea... cientos de miles de personas han comprobado este método revolucionario, reza el anuncio comercial.

¿Pero en qué he estado pensando todo este tiempo? ¿Por qué sigo yendo al gimnasio a sudar como desesperada cuando la solución está en treparme en el bío shaker, usar zapatos espantosos y dormir con un anillo?

¿Para qué gastar tanto tiempo y esfuerzo en mis tardes libres de la escuela?

Cuerpo marcado, magro y estético sin dolor y sin sudar... ajá.

¿Y sabías que por $199 pesos puedes aumentar tu autoestima y conquistar a quien elijas? ¿Para qué ir a terapia o al diván de Valentina cuando la solución está enfrascada en el Seduxion Plus, feromonas con impacto directo a los sentidos...

Y sí hay quien lo cree y encarga no uno sino cinco frascos...

...para reflexionar...






2 comentarios:

Claudia E. dijo...

Está buenísimo, Lili…
increíble pero cierto… como ese viejo método que usaban los nazis en su propaganda, oír mil veces una mentira se convierte en verdad o al menos algunos ingenuos se la creen.

Un beso,
Clau

Valentina dijo...

Y hay muchos productos más por el estilo... si fuera cierto ya no habría lugar para médicos, psicólogos, nutriólogos, gimnasios, cirujanos, etc. Hay incluso cápsulas milagrosas que curan cualquier tipo de enfermedad, la misma pastillita remedia lo que se te ocurra. Te mando un abrazo hasta allá.