martes, 30 de noviembre de 2010

Lección Aprendida

No caminé al borde de la muerte...
Tampoco estuve en coma...
Ni vi la luz al final del túnel...


Sí supe cómo se siente olvidar palabras...
Comprendí el significado de no comprender el significado de una lectura...
Viví la sensación de un torpe caminar...
Experimenté el tropezar con muebles y paredes...


Pensé en el horror de ya no poder pensar...
De olvidarme hasta de mi nombre...
Me imaginé cómo sería perder la capacidad de trabajar...
de estudiar... de conversar... de comentar una película...
de recordar a quienes amo... de amar... de sonreír...


Dicen que del dolor se aprende y no se equivocan quienes esa máxima aseguran...
Lo vivido en los pasados días ha sido una de las mejores enseñanzas en mi existencia...


Hoy veo la vida con ojos nuevos...
Todo, hasta lo más insignificante, se convierte en ocasión para celebrar...
Ahora fluyo con la vida, ya no nado, ni volveré a nadar, contracorriente...
El nervio, la ansiedad, la adrenalina y la tensión serán asunto del pasado...


Atesoro la vida ahora más que nunca...
No tiene sentido vivir en el castigo y rigidez...
Seré indulgente con mi cuerpo, con mi corazón, con mis sentimientos, con mi intuición y con las dos...


tanto con Lily como con la Valentina...

2 comentarios:

Alex dijo...

Amiga,es impresionante por lo que algunas veces tenemos que pasar para apreciar lo que tenemos y decidir ser libres de una vez y dedicarnos sólo a vivir, sentir, sonreír y amar. Amiga, sé libre, ¡vive libre!

Lily Valentina dijo...

Son lecciones dolorosas para entender cómo vivir sin tanta presión y ansiedad. Ten la seguridad que viviré de acuerdo a tu consejo, con la libertad de disfrutar, hacer sólo lo que me gusta, apreciar mis facultades mentales y las bendiciones que me llegan de todas partes.