martes, 18 de octubre de 2011

¿Cabrones vs. Cabronas?

El sábado pasado invité a Marco al teatro.
Fuimos a ver "Defendiendo al Cavernícola", monólogo que yo había visto hace algunos años.
Quise volver a ver esta puesta en escena para reírnos juntos de nuestras abismales diferencias.
Me refiero a esas particularidades que nos hacen ser tan distintos a los hombres de las mujeres y viceversa.
El argumento abunda en clichés, por supuesto, pero pone sobre el escenario los eventos cotidianos que se dan entre quienes viven en pareja.
Posiblemente algunas parejas se salven de los ejemplos escritos a continuación, pero puedo asegurarte que por lo menos uno o dos de éstos les quedan a ti y tu pareja muy a la medida:
-El hombre sólo se puede concentrar en una tarea... las mujeres somos multitasking.
-El hombre se hipnotiza frente a la televisión, sobre todo cuando juega su equipo favorito
-Las mujeres nos hipnotizamos cuando vemos cosas que nos gustan o cuando nos dicen palabras dulces al oído
-Los hombres hablan poco, el autor del monólogo dice que 2000 palabras al día son suficientes para ellos.
-Las mujeres tenemos la necesidad de expresar por lo menos 7000 palabras por día.
-Los hombres no hablan con otros hombres de sus sentimientos y emociones... mucho menos lloran y se abrazan entre ellos.
-A las mujeres nos gusta compartir con otras mujeres lo que sentimos, lloramos y nos abrazamos.
-En un antro o restaurante los hombres no se acompañan al baño, las mujeres vamos todas juntas, casi tomadas de las manos.
-Los hombres protegen a los suyos.
-Las mujeres prodigan cariño y cuidados a los suyos.
-Ellos negocian.
-Ellas colaboran unas con otras.
-Los hombres botan la toalla mojada sobre la cama, maña que nos para los pelos de punta a las mujeres.
-Ellos deciden en un minuto cómo se vestirán, nosotras nos cambiamos tres veces antes de salir.
-Cuando los hombres conducen un automóvil eso hacen, conducir. No pueden hacer ninguna otra actividad. Necesitan concentrarse.
-Las mujeres podemos realizar distintas actividades a la vez. Nuestro cerebro está programado para ello. Podemos manejar, escuchar la radio y discutir con él sin mayor problema.
En fin, "Defendiendo al Caver" es un monólogo divertido sobre las diferencias de los sexos.
Inicia con voces de mujeres diciendo: "TODOS los hombres son unos CABRONES".
Y en los últimos años se han editado varios libros "tipo Sanborns" para aprender a ser una perfecta CABRONA.
Yo no creo que la relación de pareja se trate de un concurso para ver quién es más CABRON o CABRONA.
Yo creo más en la unión de dos mundos que respetan su individualidad y diferencias.
Y por supuesto, somos extremadamente opuestos. Eso nos atrae.
¿A poco te gustaría tener como pareja a alguien exactamente como tú?
Yo me volvería loca de atar en poco tiempo je je.


NO


SI


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Saludos Valentina...
Me acordé de una serie de conferencias que dio el Sr. César Lozano.
"Mujeres difíciles, hombres complicados".
Lo más chistoso es que lo trato de poner en práctica y qué crees... lo mismo de siempre... jajajaja
¡MUJERES!
jajajaja
Hay que ver de quién fue la idea de crearnos tan diferentes y luego tratar de que nos acopláramos como almas gemelas...

Lilia Carrillo dijo...

Ay anonymous, no trates de comprender a las mujeres, sólo ámalas ;)

Héctor García dijo...

Vi la obra hace como tres años y creo que continúa tan vigente como el día en que se escribió. Parece mentira, pero es tal nuestra falta de autoconocimiento que tiene que venir alguien de afuera a explicarnos estas diferencias tan básicas para que “nos caiga el veinte”. Y aun así, saliendo del teatro y subiendo al auto (o antes), famoso "veinte" se ha perdido. Irónico, pero cierto. Creo que hay que aceptar y comprender estas diferencias para crecer como personas. ¿Tú qué opinas?

Lilia Carrillo dijo...

El día en que hombres y mujeres estemos conscientes de nuestras diferencias ya no habrá pleitos ni gritos ni sombrerazos :)