miércoles, 9 de marzo de 2011

La Lectura Llegadora

En el vagón del tren en el cual iban Valentina & Baby Face de Londres a Dover no había nadie más que ellos dos.

Acomodaron su vasto equipaje con toda calma y tranquilidad y se sentaron en un lugar con mesa para degustar sus deliciosos paninis, bebidas y postres adquiridos en la Panadería Paul, cadena francesa que ya está en Londres.

Comieron muy a gusto, las tartas y pan dulce de esta tienda son realmente exquisitos.

Al terminar sus sagrados y muy ricos alimentos, Valentina extrajo de su bolsa un libro adquirido en Londres, titulado "Human Nature: Fact and Fiction" editado en 2006 por Robin Headlam Wells y Johnjoe McFadden (Ed. Continuum).

Baby Face le pidió entonces a Valentina que leyera en voz alta y así lo hizo ella.

Una estación antes de llegar a Dover abordaron al vagón en el cual ellos iban muy felices disfrutando la lectura, dos vagabundos con acento escocés, tal vez irlandés.

Uno de ellos saludó amablemente mientras el otro solamente miró a la pareja de reojo.

Decidieron sentarse al lado de la Valentina & Baby Face.

A Valentina le dio cuscús y eso que aún no ocurría el atraco de París.

Baby Face la miró con ojos de "no pasa nada, continúa leyendo sin temor a nada".

Y ella continuó la lectura en voz alta acerca de los pensadores de la Ilustración cuyos objetivos eran limpiar al mundo de prejuicios, dogmas y supersticiones. Deseaban liberar al mundo de la tiranía y servidumbre. Creían en el principio de los Derechos Humanos Universales. Hicieron campaña para abolir la esclavitud.

Tales poetas y filósofos anhelaban erradicar la desigualdad entre naciones y deseaban ver el progreso de la igualdad entre países.

Jean-Jacques Rousseau (Discourse on The Origin of Inequality, 1755), consideraba que para descubrir el origen de la desigualdad, era menester conocer primero la naturaleza del ser humano. Sin tener tal conocimiento jamás comprenderíamos las causas de la crueldad humana, de la desigualdad social o de la explotación de una clase a la otra.

Cuando Valentina llegó a esta parte de la lectura se anunció la próxima parada en Dover.

Cerró el libro para guardarlo y el vagabundo que había saludado gentilmente aplaudió y dijo "Thank you" con una sonrisa carente de algunos dientes.

Ella se sintió conmovida, ya no asustada.

No supo si fue coincidencia o casualidad, lo que sí fue claro y cierto es que su lectura estuvo cargada de contenido que llegó no sólo a los oídos, sino al alma de su pequeño gran foro en el vagón de tren.

Con los ojos inundados y la lágrima trémula tipo "Remy", ella tomó sus cosas y les dijo adiós.

Valentina & Baby Face entonces descendieron del tren para continuar su aventura, ahora en ferry, rumbo al viejo continente.


Valentina en el tren rumbo a Dover


A punto de degustar las delicias de Paul

Vista de una de las innumerables panaderías Paul
mmta... ya se me antojaron...

No hay comentarios: