miércoles, 30 de mayo de 2012

La Canción Inspiradora de la Petite Woman in a Bright Dress

Petite Cool Woman in a Bright Dress

El domingo es caluroso, siento la piel pegajosa, la luz del sol se desliza, sin permiso, por la ventana de mi recámara.
Llevo puesto un vestido largo, color bugambilia lila, hecho en la India. Lo adornan flores y el símbolo del infinito en calado blanco.
Ando descalza y total, absoluta y completamente despeinada.
Me miro en el espejo de tres hojas.
Puedo verme de frente y de perfil, hacia la derecha, hacia la izquierda.
Las bocinas cantan "Long Cool Woman in a Black Dress" y yo me siento "Petite Sexy Cool Woman in a Bright Dress.
Inevitablemente bailo al ritmo de la música.


Muevo mi cintura, despliego mis brazos hacia los lados, hacia arriba, rodeo mi cuello con mis manos, me abrazo, me toco, me suelto, me agacho, me levanto, bajo la cabeza, mis cabellos van y vienen.
Contoneo mi cadera, provocadora, sin dejar de observarme, atenta a mis movimientos.
Le sonrío a la que me devuelve la mirada en el espejo.
Me fascina lo que veo, pero más disfruto la flexibilidad de mi cuerpo, esa sensación de libertad, la alegría de estar y sentirme viva, la felicidad de escuchar esa rolita que me mueve tanto.



viernes, 25 de mayo de 2012

La Despedida

Nunca te alejes sin decir te quiero.
Hoy escribí el epílogo de un libro más que narra la historia de mi vida.
Me despedí de un señorón y una señorona quienes no sólo me abrieron las puertas de su hogar sino las de su alma y su corazón.
Me dijeron hoy palabras hermosas, como siempre.
Me reiteraron hoy su cariño, como siempre.
Se sienten tristes por este final, como todos lo estamos.
Tuve el honor de formar parte de su clan durante cinco años.


Les agradezco sus detalles, cada  uno de los momentos agradables, el haberme integrado a su familia desde el día uno.
Los amo con todo mi ser y mi corazón.
Y me parte el alma haberles dicho adiós.

jueves, 24 de mayo de 2012

Me Doy Permiso

No creas que tomar las riendas de tu vida, sin alguien más que ayude, sino solamente contigo y tu alma, es asunto fácil.
Hay días coloridos y otros más marrón.
Comenzar un nuevo sendero no es tarea fácil.
Un día amaneces con una idea clara y al otro la brújula se te ha perdido.
Sin embargo, te sientes menos triste que durante aquellos días cuando te sentabas en ese sillón sin saber por qué la opresión en el plexo solar, la razón del nudo en la garganta.
La sensación es menos asfixiante que cuando mirabas la fuente del jardín imaginando, soñando, sin tomar acción alguna, sin moverte de lugar.
Ahora puedes ver esas bugambilias de color prendido y casi fundirte con ellas.
Y tienes la certeza de que estás en compañía de la mejor persona del universo:
Estás contigo mism@.
Ya vendrán mejores días, de eso no me queda la menor duda.
Mientras eso sucede, me permito sentir el dolor por lo que que pudo ser y no será, me permito llorar por lo perdido, me doy permiso de sufrir hasta la médula, con esa intensidad que a mí me caracteriza.

martes, 22 de mayo de 2012

De Poca Madre

Tengo frente a mí un nuevo sendero.
No tengo idea hacia dónde me lleve.
De lo que tengo certeza es que el destino es lo de menos, lo interesante será el paseo.
De pronto me aterra la idea.
Salir de la zona de confort por lo general da miedo.
Sin embargo, me asustaba mucho más la idea de  apagarme.
Ahora siento cómo poco a poco los colores regresan a mi ser.
La sangre fluye por mis venas, mis ojos recobran el brillo, mi piel siente, el corazón me late y la sonrisa es sincera.
Me encontraba en un callejón sin salida, al menos así lo creía.
Todo era cuestión de perder el miedo a ser yo misma otra vez.
Se siente bien ser YO.
Se siente poca madre poder hablar, decir, gritar, esgrimir y hacer las cosas sin reglas, calendarios ni horarios.
La flexibilidad regresa a mis articulaciones, mi mente viaja, la imaginación regresa, los sueños se cumplen, la vida frente a mí se abre y me veo plena, llena, valiente y feliz.

viernes, 18 de mayo de 2012

¿Sueños Guajiros?

Cierto día me desperté y, sin ser consciente de ello, dejé de seguir mis sueños.
Me instalé en la comodidad de la realidad y de la cotidianeidad.
Llegué a considerar que aquellos sueños míos habían sido guajiros, producto de mi pisciana tendencia a fantasear.
Y así pasó algún tiempo.
Mucho tiempo, para ser sincera.
Un día desperté y mi voz interior me habló al oído.
-Te estás petrificando- me dijo en tono muy bajito.
Durante esa jornada la vocecita me siguió a todas partes.
Al día siguiente mi niña interna volvió a hablarme al oído.
-Te estás tornando en un gris opaco.
Pasé más de doce horas imaginándome de un tono gris opaco y petrificada, para acabarla de amolar.
¿Dónde habían quedado mis colores?
¿En qué parte se extravió mi locura no insana?
¿Cuándo me perdí sin afán de encontrarme nuevamente?
Al tercer día desperté y no hubo voz ni niña interna que me hablaran.
Yo decidí volver a seguir mis sueños.


Me puse de pie y caminé por la vereda que posiblemente, no, seguramente, me conducirá hasta ahí.
Convencida estoy que encontraré mi tesoro anhelado, al final del arco iris.

jueves, 17 de mayo de 2012

Disposición

Podría pasar no una, ni dos, ni tres horas escribiendo sobre mis y sus necesidades emocionales.
Podría encontrar las palabras más adecuadas para estos casos.
Podría repetir, como disco de vinilo rayado, este tipo de monólogos o de diatribas, día tras otro, mes a mes, año con año.
Podría intentarlo con el afán de lograr un equilibrio para cubrir las necesidades de ambos.
Podría...
Hasta llegado el día de darme cuenta de que cuando no existe la disposición, de ningún lado de la mesa, no pasará la charla de meras buenas intenciones.
La DISPOSICION es un ingrediente clave en cualquier tipo de relación, especialmente en la de la pareja.

Si yo no estoy dispuesta a ofrecer ni un gramo de lo que el otro requiere, tarde o temprano, más temprano que tarde, éste se sentirá desgastado, desmotivado y desanimado para continuar.
Y no creas que tener disposición es misión imposible.
Pregunta: ¿A ti te costaría un gran esfuerzo tener disposición para realizar algunas actividades con tu pareja?
¿Estarías falt@ de disposición para ceder un poco aquí, un poco allá, máxime si tu "significant other" ha puesto de su parte?
Disposición es la palabra que ocupa mi mente estos días.
A falta de ella el día de hoy me encuentro en el lugar correcto.
Y no es que me haya faltado, disposición era lo que me sobraba.

martes, 15 de mayo de 2012

Mujer De Una Sola Pieza

Me encontraba en una casa y no era precisamente la del sol naciente, pero sí tenía mucha luz.
Las paredes, cortinas, muebles, techo y decorado eran de un color no colorido, como el blanco.
Los rayos solares se colaban por las cortinas de tela suave y transparente.
Afuera había un lago de color azul índigo y un poco más lejos, pero no mucho, se divisaba una playa quieta.
Palmeras altas y anoréxicas flanqueaban uno de los tantos jardines, para mi total asombro y admiración.
Intuí que ésta era mi casa.

La casa de mis sueños.
Y yo la estaba reconstruyendo.
Me reestructuraba internamente.
Juntaba las partes rotas.
Me convertía en mujer de una sola pieza.
Ahora me invadía la luz, el sol se posaba en mi rostro, el laberinto de la oscuridad había quedado en otra parte.


sábado, 5 de mayo de 2012

Los Tas

No todos, pero sí algunos que rondamos los 40's y los 50's somos extremadamente exigentes.Nos quejamos del tránsito, quisiéramos tener un helicóptero para llegar de volada a nuestro destino, sobre todo si vivimos en la Ciudad de México.
Alucinamos a un jefe demandante, desearíamos, de preferencia, ni tenerlo.
Somos hedonistas a morir y nos gustaría serlo de tiempo completo, sin descanso, las 24 hrs del día, 365 días al año o 366 si se trata de año bisiesto.
Nos desgastamos tratando de vernos jóvenes.
Cada nueva arruga, o cana, nos paraliza de terror.
Algunos no hemos tenido hijos, o porque no queremos o porque no se dio; por tanto, el maternaje o paternaje se dirige a nuestra propia persona.
Nos compramos nuestros juguetes, nos consentimos, nos apapachamos, somos exageradamente autoindulgentes.
Ya sea por la culpa o la carencia, bien que nos autoabrazamos.
Desconocemos sobre la preocupación que tienen los que hijos tienen.
Queremos tener a la pareja perfecta, la sonrisa constante y la mesa bien puesta.
Demostramos poca paciencia, cero tolerancia y bastante gracia para salirnos por la tangente.
Vivir en esta época la décadas de los tas es completamente diferente a como la sobrevivieron nuestros progenitores.
A esta edad ellos ya eran o se sentían viejos.
Nosotros nos sentimos y queremos vernos atemporales.
Sin embargo, cuando entramos a un lugar y nos dicen "Señora" o "Señor", nos reconocemos en el espejo tal cual somos.
Ajá, pero el "reality check" se pasa tan pronto nos enfrascamos en alguno de nuestros pasatiempos favoritos, el que sea.
Volvemos prontito a adoptar la actitud jovial y juvenil.
¿Te digo algo?
A mí me encanta ser cuarentona en este tiempo.
Quizás mi piel ya no luce tan lozana como a los 20's, pero te aseguro que mi cerebro es otro MUNDO, uno que muchos jóvenes, te lo garantizo, hasta pagarían por tener.
Así que viva la vida.
Me termino mi Guinness al tiempo que termino de escribir el post de hoy.
Te mando un abrazo, dondequiera que estés.

jueves, 3 de mayo de 2012

Mon Michel

Te había prometido dejarte ir.
Te había dicho nos veríamos en otro tiempo y espacio.
Al parecer soy mujer que no cumple sus promesas.
Mujer que no tiene palabra.
Esta mañana pensé en ti, mon Michel.
Te añoro eternamente.
Si hubieras venido a este mundo este año cumplirías 15 años.
Me pregunto cómo serías.
Me imagino tu sonrisa, tu voz y tu mirada.
Me pongo triste de pensarte una y otra vez.
Te lloro y me dueles hasta las entrañas.
Tu ausencia me persigue cada día.
Mon Michel, I love you, I love you, I love you.
That's all I want to say.
Until I find a way...
I will say the only words I know that you'll understand...

(Michelle/The Beatles)


miércoles, 2 de mayo de 2012

Noche Tormentosa

Adoro las noches de tormenta.
Anoche fue una de ellas, lamentablemente de corta duración.
La habitación se encuentra en silencio, escucho con claridad las gotas de lluvia sobre el domo de la escalera, no sobre el tejado caliente, como en la película de la Taylor y el Newman.
Oigo el viento a través del sonido de las campanas tubulares, una para el Ying y otra para el Yang.
Podría pasarme el tiempo del mundo escuchando el tintineo, pero sólo dura mientras vive el viento.
Escucho perfecto cómo se arrastran y levantan en torbellino las hojas y pétalos secos de las bugambilias que custodian la entrada a la casa.
Los truenos generan un ruido que me llega al plexo solar.
La luz de los relámpagos se cuela tímidamente por la cortina entreabierta.
Los gemidos de la Kana, espantada por los rayos, se entremezclan con este drama natural.
Se acerca a mí, acaricio su cabeza y la tranquilizo con palabras.
Se acuesta sobre el tapete, a un lado de la cama.
Y yo miro el techo en tanto la tormenta se desata y se calma.