miércoles, 14 de octubre de 2009

Las Ojerotas de Drácula

Me han regresado al cuerpo el oído, ojo, paladar y sien del lado derecho de mi pobre cabeza que sufrió tanto durante los últimos ocho días. Ya se fue el dolor y ni le dije adiós, no se lo merecía. Es una alegría tan inconmensurable la que siento desde el momento en que el doctor hizo la curación y como por arte de magia se largó por fin el perro infernal que me había estaba atacando. Anoche le comentaba a Marco, entre el dolor, mi ironía y negro sentido del humor, que seguramente lo que me estaba ocurriendo era cosa del demonio. Ahora ese episodio del libro de mi vida ya es historia y me puedo reír como doña Borola Tacuche de Burrón, juar, juar, juar, cuando recuerdo que llegué a pensar que eso que tenía era cosa del mismísimo maligno. Mi "Yo" está de regreso, otra vez me estoy riendo de las cosas que me pasan por la mente (cosas que me pasan por la cabeza gracias a mi "Ello"), tanto en las buenas como en las malas. Al "Super Yo" mejor ni le hago caso. Buenas noches, espero duerman rico... yo dormiré como si estuviera echada en mi hamaca acapulqueña. Llevo varias noches sin dormir, creo que hace rato espanté al doctor con mis ojerotas de drácula, mi personaje de terror favorito.

1 comentario:

La Indomable dijo...

Hey Sis, la indomable here... Ahora sí me hiciste reír jajajajajajajjaja
despues de que ayer casi me vomito del dolor. Pasé por la más amarga y dolorosa de las experiencias. Parecía que iba a parir un buey de 800 kilos!!!!!! Sentí la visita de la fría, me dio miedito, estaba helada. Sentí que ya iba a colgar los tenis jajajajaja.
Qué bueno que ya estamos bien. Yo también parezco vampiro, llevo noches sin pegar el ojo. Descansa. Tqm!!!!!