jueves, 8 de octubre de 2009

El Dolor que llega hasta el cerebro

Hace como dos meses empecé a sentir rara una de mis muelas del lado derecho. No le hice caso porque mi prioridad en aquellos días era atender asuntos relacionados con la "ya chole" cirugía a la que me tuve que someter : ) Y pues cada vez que comía algo frío, como mis famosos helados de vainilla bañados con chocolate fudge, nueces y cerezas, pues sentía que la virgen me hablaba. Pasó el tiempo y la ignorada muela iba de mal en peor... El martes en la noche preparé la ya usual ensalada de lechuga mezclada con todos los ingredientes que encuentro en refri y alacena... Y ahí estaba yo toda mona disfrutando mi suculenta cena light cuando uno de los jitomatitos cherry fue masticado por mi dañada muela y casi casi boté el bowl ensaladero para poder retorcerme del dolor. Cuando el frío toca el nervio, sientes que un dolor agudo te llega hasta el mismísimo cerebro y la vista se te nubla. Las punzadas se quedaron en mi boca, mandíbula, ojo, cerebro y cerebelo un rato que para mí fue eterno. Por supuesto no me terminé mi ensalada y me fui a dormir con la muela punzante. Ayer supe que lo más seguro es que me tenga que hacer una endodoncia. Estoy en la oficina y el agüita de jamaica que tomé a la hora del lonchito me hizo favor de invadir mi pobre muela y estoy que no me aguanto el dolor... me tomé un pain killer... espero que haga efecto rapidito, claro está.

1 comentario:

La Indomable dijo...

Hey sis, puedo identificarme perfectamente con este episodio porque ya pasé por la misma experiencia y es horrible todavía recuerdo aquella amarga y dolorosa experiencia en San Miguel de Allende cuando deambulé buscando un dentista valiente en aquel pueblo que se aventara el paquete con una servidora...........utssssss se siente de los mil diablos!!!!!!! juntos todos los de la película Ghost vienen y te carga el payasín...